|
|
|
|
|
|
Poema al amor invernal
En la selva, como el viento y el agua nada aguarda. Ni las hojas que caen ni el zumbar de las alas ni el sonido del río ni la tierra en su entraña. Inexorablemente otro milenio desata su marcha. Ni en los cielos las estrellas son estáticas. Son un guiño que el pasado nos delata, Diciéndonos, el tiempo tampoco nos aguarda. Por eso el corazón pierde sus hojas de esperanza.
|
|
|
|
|
|
|